Las instituciones educativas en su totalidad deberían tener una conciencia frente a la delincuencia informática, puesto que ellos se lucran al robar información personal y luego ofertarla en el mercado negro a otros criminales, que a su vez transforman los datos en dinero a través una sucesión de tácticas fraudulentas. ¿Por qué necesitan saber esto la comunidad universitaria?
Porque todas las instituciones de educación básica, media y superior ahora cuentan con bases de datos llenas de información personal de docentes, trabajadores y estudiantes. Para los delincuentes informáticos, a quienes no les interesa a quiénes les hurtan la información personal, estos enormes repositorios de datos personales establecen un objetivo llamativo.
Actualizar y actualizar
Instalar actualizaciones y revisiones periódicas a todas las aplicaciones es una de las tareas más primordiales que puedes realizar para mitigar las vulnerabilidades, que pueden utilizar los ciberdelincuentes para que entren silenciosamente a tus dispositivos y equipos de cómputo.
Recuerda que los ciberdelincuentes están siempre alerta a las vulnerabilidades no corregidas. Y no te descuides que no son solo tus dispositivos y tus aplicaciones los que requieres tener actualizados: asimismo hay aplicaciones auxiliares empleadas por los navegadores, como Java, Flash, Adobe, etc., que requieren revisiones.
Las contraseñas nunca son suficientes
Si estás resguardando una cantidad muy enorme de datos personales, una sola contraseña pueda que no sea suficiente. Ten en cuenta implementar una autenticación de doble factor (2FA). Lo anterior se refiere a un control biométrico, como una huella digital, o una contraseña de 4 dígitos.
Asimismo, para los que usan redes sociales como Facebook y Twitter ya deberían estar familiarizados con la noción de 2FA, ya que dichos servicios se emplean para prevenir el ingreso no autorizado.
Efectuar respaldo de seguridad sobre tu información
Los respaldos de seguridad de la información personal y los sistemas establecen la última línea de defensa (y la mejor) ante los delincuentes destructivos. En el caso de una amenaza como el secuestro de información o ransomware, puede ser la única forma de ganarles a los malos. Quizás quieras considerar hacer un respaldo de seguridad en la nube, pero hazlo como un complemento y no como un reemplazo de los respaldos de seguridad locales, que se comprueban y almacenan en forma segura.
