Daisy Johana Puin Gaitán, estudiante de décimo semestre de Ingeniería Industrial, ocupó el octavo lugar en la Vuelta Colombia, categoría Sub. 23. Además, viene de ser campeona nacional y subcampeona Panamericana.
La Universidad Libre cuenta con una de las principales cartas del ciclismo femenino colombiano. Se trata de Daisy Johana Puin Gaitán, alumna de la Facultad de Ingeniería, que viene de una familia amante del deporte del pedal. Su hermano Marcos y principal motivador, también corrió la más reciente Vuelta a Colombia, alcanzando el premio al mejor novato con tan solo 19 años.
En una completa entrevista, Daysi nos cuenta un poco más de su historia deportiva y personal, y de cómo ha logrado, poco a poco, abrirse camino en un deporte que no solo se caracteriza por los legendarios triunfos que le ha dado al país, sino también por su marcado machismo.
¿Cómo fue su experiencia en la pasada Vuelta a Colombia, versión 2018?
Fue gratificante. Durante la competencia se notó la evolución del ciclismo femenino. Los promedios estuvieron bastantes altos, medias de 47km/h y eso habla del alto nivel. Participaron corredoras de EEUU, México, Costa Rica y China.
Gran parte de mi preparación la debo a mi hermano, quien también es ciclista de alto rendimiento y quien participó en la pasada edición de la Vuelta a Colombia, siendo el mejor novato a sus 19 años.
Juntos entrenamos desde enero con un alto nivel de exigencia. Sus consejos me sirvieron en la carrera y estoy muy contenta con el resultado que tuve, combinando el deporte con el estudio, algo que es muy gratificante para mí.
¿Cómo hace para combinar su formación como ingeniera con la práctica del ciclismo? ¿Es difícil organizar horarios?
Al principio no fue nada fácil combinar ambas actividades. Cuando empecé a estudiar, el rendimiento deportivo empezó a bajar rápidamente y por más que me esforzara por realizar bien mis entrenamientos, no podía, ya que no me encontraba acostumbrada a trasnochar. Dormía de 5 a 6 horas diarias, cuando un deportista de alto rendimiento debe hacerlo por lo menos 8 horas. Luego de unos meses, se acomodó el entrenamiento de acuerdo con mi descanso y de ahí comenzó a mejorar el proceso.
Actualmente no solo monto bicicleta y estudio, sino que además hago la práctica empresarial en las horas de la tarde en la Federación Colombiana de Ciclismo. Esto me requiere un alto esfuerzo, pero todo es de disciplina, constancia y voluntad. Si uno se propone una meta clara, es seguro que se puede conseguir, pero primero se tiene que tener claro lo que se quiere alcanzar en la vida, lo que implica, en la mayoría de casos, sacrificar muchas cosas que a cualquier joven a mi edad le gusta.
¿Cómo ve la participación de las mujeres en el ciclismo y qué considera que las universidades deben hacer para apoyar esta práctica deportiva?
El ciclismo femenino en Colombia ha venido evolucionando y ahora se ven deportistas en el extranjero representándonos, algo muy bueno para generación futura, pero todavía falta más apoyo y tecnología, no solamente en las mujeres, sino también en los hombres.
Siempre he dicho que el ciclismo es uno de los deportes más desagradecidos. Monta uno horas en la bicicleta y la recompensa es poca, para todo el sacrificio que hay detrás de un deportista.
En cuanto a las universidades, creo que deberían apoyar todos los deportes. Detrás de un gran deportista, hay un gran sacrificio. Deberían existir más ayudas e incentivos y qué mejor que representar con orgullo a la Universidad en eventos nacionales e internacionales.
En un plano más personal, cuéntenos algo de tu historia con el ciclismo. ¿Cuándo empezó a practicarlo y en qué momento terminó como una ciclista profesional?
Desde pequeña no quería montar bicicleta, fue algo que empezó a darse con el paso del tiempo. Mi hermana Diana fue una gran motivación e incentivo, quien además es múltiple campeona nacional y campeona panamericana. Me decía: “El ciclismo es 90% mente menos 10% cuerpo”. Ahora que lo práctico recuerdo, una a una, sus palabras.
Con 14 años corrí mi primer departamental, algo nerviosa, ya que solamente entrenaba los fines de semana, pero aun así me llevé la medalla de oro, tanto en ruta como en la CRI (contrarreloj).
Mis padres y mi hermano Marcos, también han sido importantes pilares para mi carrera deportiva.
Actualmente, soy campeona nacional y subcampeona panamericana. He viajado a Argentina para el Tour de San Luis, una experiencia bonita ya que corrí contra equipos como el Astana, GW Shimano, entre otros, y eso me dio una perspectiva diferente en el ciclismo, debido a que es muy organizado y un deporte muy profesional.
En este momento estoy terminado mi carrera y no he competido mucho, pero gracias a los logros anteriores fui convocada para ir a la Vuelta a Colombia este año. También estoy convocada para los Juegos Nacionales, evento de gran importancia, ya que reúne los mejores deportistas de todo el país en todas las disciplinas. Estaría muy contenta de participar representado a mi departamento y si es posible también a mi Universidad.
¿Qué perspectivas tiene en el corto plazo para su carrera como Ingeniera y como ciclista profesional?
A nivel deportivo, se tienen varias metas. Está el campeonato nacional, los juegos nacionales y la posibilidad de que un equipo extranjero me convoque para correr en los Estados Unidos, algo que sería estupendo.
Una de las cosas que quiero hacer es salir del país y, si se puede con ayuda del ciclismo, poder continuar mis estudios superiores en otro país. En realidad, me visualizo en el exterior, ya sea en el ciclismo o en el estudio.
Tengo la idea de seguir combinando estas dos pasiones, ya que para mí ser ingeniera es también un logro importante, pero estoy consciente que debo seguir avanzando para darle valor agregado a mi profesión.
¿Qué recomendación le da a sus compañeros y especialmente a las mujeres de nuestro programa que tienen actividades paralelas a sus estudios en campos como el deporte o las artes?
Les diría que si desean alcanzar un sueño, sea académico o deportivo, deben tener un objetivo claro y saber realmente lo que quieren. Esto les dará la convicción de seguir llevando a cabo lo que se propongan (sobre todo en los momentos más difíciles donde quieran desistir). Sabiendo que no va a ser fácil, pero disfrutando cada día como si fuera el último, ya que es una oportunidad valiosa.
Además, les diría que los sueños se hacen realidad, solo hace falta disciplina, constancia y voluntad.
¿Desea compartirnos algunos comentarios más?
Todo lo que he logrado hasta el día de hoy, no solo en el ciclismo sino en el estudio, (porque además soy auditora interna en sistemas integrados), ha sido posible con la voluntad de Dios y la ayuda de todas las personas que han sido partícipes en mi carrera deportiva y a nivel profesional.
Está mi familia, la liga de Cundinamarca, los profesores de la Universidad Libre y mis compañeros. A todos ellos mil gracias.
